jueves, 17 de enero de 2008

Linda Draper.- Needlessly



Hace mucho tiempo, yo tenía un matrimonio, una casa, una jefa a la que criticar y una vida, más o menos, feliz. Todo naufragó en agosto. Y fue trágico.

Como en todo naufragio, muchas cosas se perdieron en el abismo, otras se rompieron, otras quedaron flotando en la superficie, a merced de las olas, impasibles a lo que sucedía a su alrededor: son tazas, teteras, mesas, personas, que de vez en cuando vuelven a impactar contra mi vida y que miran con ojos vacíos, como si nada hubiera ocurrido.

Hoy pasó de nuevo. O eso creo. Yo caminaba con rumbo a mi casa, curriculums en mano, listo para la entrega. Caminó a mi lado, durante varias manzanas, enfundado en un abrigo verde. La humedad parecía haberle hinchado, o tal vez la armagura. Me costó reconocerle, de hecho aún tengo dudas de si era él. Si lo era, no saludó. Yo seguí mi camino.

Al llegar a casa, me topo con un cartel ¿Cuánto tiempo esperarías al amor de tu vida?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

qui era qui era? qui era qui era?

Ei, a veure si quedem i et passo el nou de la Draper, que l'estic escoltan rait nau (i de moment no em mata).

Una abraçada

Vic dijo...

Juraria que no el coneixes...

Això de la Draper és una llàstima perque aquest de One Two Three Four, tenia el seu punt.

Abraçades moltes!