domingo, 26 de abril de 2009

Mercury Rev.- Goddess on a highway



El día de Sant Jordi me regalé Del inconveniente de haber nacido de Cioran. Como tantos otros libros, no lo busqué. Fue él que se plantó ante mí en la Plaça del Poble y yo sólo tuve que invitarlo a pasar. Añadiendo al placer de su lectura, la sorpresa de su encuentro.

Se trata de aforismos, ciertamente poco optimistas, pero no por ello menos interesantes, y con los que, a menudo, no comulgo. Aunque hay algunas que me vienen como anillo al dedo:

En las épocas de esterilidad se debería invernar día y noche para conservar las fuerzas, en lugar de malgastarlas en mortificaciones y en rabietas.

Cat Power.- The Greatest



Ya no puedo ser tu ángel. Tumbado en la cama, recuerdo tus labios. La lluvia cae sobre la pizarra en un crescendo de corcheas y siento tus labios en mis labios. Y pizarra, nube, sábanas y recuerdo se hacen grises. Más grises.

Ayer me besaste, pero te fuiste con él. O con otro. No importa. Y no quería que te quedaras, pero te fuiste con él. O con otro. Fue la nube, fue el alcohol. Fue un beso dulce, que hoy no recordarás. Y no importa. Pero ya no puedo ser más tu ángel, pagando tus cuentas, aparcando tu coche, liando tus cigarros.

Llueve y todo es desorden, redoble de tejados, todo se pierde bajo la lluvia.