jueves, 17 de diciembre de 2009
Miles Davis.- Ascenseur pour l'échefaud
Es mi cumpleaños. Me caen 33 y estoy bien. De hecho, estoy extrañamente bien. Por primera vez en mucho tiempo, las piezas parecen encajar y formar una imagen, aún confusa, pero llena de esperanza. Y es extraño, porque no me siento bien. Tal vez sea la novedad...
Pero es mi cumpleaños y lo voy a celebrar. Porque este año es digno de celebración, creo que lo sabes. Y si no, la misma decadencia de este blog no deja de repetirlo. Todo va bien. Y aunque no encuentro un amor, o sigo sin aprender a decir "no", las cosas van bien, relativamente bien. Desde luego, no tengo motivos para estar eufórico. Todo se tiñe de un gris calido y esperanzador, que nunca acaba de tornarse en llama de realidad, pero confortable. The Stranglers y Golden Brown.
Así que es mi cumpleaños y me voy a abandonar. Saldré, desde luego, y celebraré. O tal vez, anule todos mis compromisos y me dedique a pasear y tomar decisiones, a sentir mis pasos, respirar y, permitirme mirar atrás una vez, ver el trayecto andado. Y disfrutar de las vistas, hasta llegar a la certeza: estoy bien.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Felicitats!!
Aquest vespre et truco i et canto el "cumpleaños feliz" com és degut.
Una abraçada ben forta!
COUSIIIIIINNNNN!!!!
Mercis!! Ens veiem aviat
Publicar un comentario